La revolución industrial y sus consecuencias
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El periodo de tiempo de la revolución industrial fue de 1750 a 1914. La revolución industrial se produjo en dos fases distintas: la primera revolución industrial, entre 1750 y 1850, y la segunda revolución industrial, entre 1850 y 1914.
La primera oleada se produjo en Gran Bretaña, Francia, Bélgica, los estados alemanes y Estados Unidos a finales de 1700 y principios de 1800. La segunda ola se produjo en España, Portugal, Austria-Hungría, Italia y el Imperio Otomano a finales del siglo XIX. La tercera ola se produjo en Asia, África y América Latina a principios del siglo XX.
♦ La Boston Manufacturing Company construye su primera fábrica textil en Waltham, Massachusetts, e introduce el sistema Lowell, en el que todos los pasos del proceso de fabricación se realizan bajo un mismo techo y son realizados por mujeres adultas en lugar de niños.
♦ El 12 de febrero de 1877, Alexander Graham Bell demuestra públicamente el teléfono por primera vez en el Lyceum de Salem, Massachusetts, realizando una llamada telefónica al Boston Globe de Boston, Massachusetts.
Ilustración y revolución industrial
diciembre 25, 2017octubre 3, 2022 Publicado en instituciones económicas, historia del crecimiento económico, historia de la ciencia, historia de la tecnología, Revolución Industrial, instituciones políticas, derechos de propiedad, Revolución Científica
A principios del siglo XVII la mente -la mentalidad, la visión del mundo- de nuestros antepasados más cultos y reflexivos seguía siendo fundamentalmente continuista con la de sus propios predecesores antiguos y medievales; pero a finales de ese siglo se había vuelto moderna1.
La Revolución Científica desempeñó un papel importante en esta transformación. El mundo de 1600 era mágico, habitado por demonios y brujas, lleno de presagios y promesas que sólo los cabalistas y astrólogos podían descifrar. El mundo de 1700 seguía siendo misterioso, pero no mágico: los demonios y las brujas habían sido desterrados; el arco iris era una prueba de la refracción de la luz y no una señal de Dios; el universo estaba tan ordenado como el reloj de péndulo del salón. El mundo encerraba misterios, no porque fuera innatamente incognoscible, sino porque el intento de comprenderlo mediante un razonamiento disciplinado y limitado por las pruebas no había hecho más que empezar.
Causas de la revolución industrial
diciembre 25, 2017octubre 3, 2022 Publicado en instituciones económicas, historia del crecimiento económico, historia de la ciencia, historia de la tecnología, Revolución industrial, instituciones políticas, derechos de propiedad, Revolución científica
A principios del siglo XVII la mente -la mentalidad, la visión del mundo- de nuestros antepasados más cultos y reflexivos seguía siendo fundamentalmente continuista con la de sus propios predecesores antiguos y medievales; pero a finales de ese siglo se había vuelto moderna1.
La Revolución Científica desempeñó un papel importante en esta transformación. El mundo de 1600 era mágico, habitado por demonios y brujas, lleno de presagios y promesas que sólo los cabalistas y astrólogos podían descifrar. El mundo de 1700 seguía siendo misterioso, pero no mágico: los demonios y las brujas habían sido desterrados; el arco iris era una prueba de la refracción de la luz y no una señal de Dios; el universo estaba tan ordenado como el reloj de péndulo del salón. El mundo encerraba misterios, no porque fuera innatamente incognoscible, sino porque el intento de comprenderlo mediante un razonamiento disciplinado y limitado por las pruebas no había hecho más que empezar.
Línea de tiempo de la revolución industrial ucraniana
La industrialización alteró fundamentalmente la producción de bienes en todo el mundo. No sólo cambió la forma de producir y consumir los bienes, así como lo que se consideraba un “bien”, sino que también tuvo efectos de gran alcance en la economía mundial, las relaciones sociales y la cultura. Aunque se suele hablar de una “Revolución Industrial”, el proceso de industrialización fue gradual y se desarrolló a lo largo de los siglos XVIII y XIX, llegando a ser global.
B. El desarrollo de las máquinas, incluidas las máquinas de vapor y el motor de combustión interna, permitió aprovechar los nuevos y enormes recursos de energía almacenados en los combustibles fósiles, concretamente el carbón y el petróleo. La revolución de los combustibles fósiles aumentó enormemente la energía disponible para las sociedades humanas.
II. Se desarrollaron nuevos patrones de comercio y producción mundiales y se integró aún más la economía global, ya que los industriales buscaban materias primas y nuevos mercados para la creciente cantidad y variedad de bienes producidos en sus fábricas.