El Año Murillo comienza con la muestra ‘Murillo y
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Bartolomé Esteban Murillo (/mjʊəɪloʊ, m(j)ʊˈriːoʊ/ mure-IL-oh, m(y)uu-REE-oh, español: [baɾtoloˈme esˈteβam muˈɾiʎo]; finales de diciembre de 1617, bautizado el 1 de enero de 1618 – 3 de abril de 1682) fue un pintor barroco español. Aunque es más conocido por sus obras religiosas, Murillo también produjo un número considerable de cuadros de mujeres y niños contemporáneos. Estos vivos retratos realistas de muchachas de las flores, de los niños de la calle y de los mendigos constituyen un amplio y atractivo registro de la vida cotidiana de su tiempo. También pintó dos autorretratos, uno en la Frick Collection que lo retrata a los 30 años y otro en la National Gallery de Londres que lo retrata unos 20 años después. En 2017-18, ambos museos celebraron una exposición con ellos[1][2].
Murillo nació probablemente en diciembre de 1617, hijo de Gaspar Esteban, un consumado cirujano barbero, y de María Pérez Murillo[3]. Puede haber nacido en Sevilla o en Pilas, una ciudad andaluza más pequeña[4] Está claro que fue bautizado en Santa María Magdalena, una parroquia de Sevilla en 1618. Tras la muerte de sus padres, en 1627 y 1628, quedó bajo la tutela de su hermana mayor, Ana, y del marido de ésta, Juan Agustín Lagares, que casualmente también era barbero[3]. Once años más tarde, fue nombrado albacea del testamento de Lagares, a pesar de que su hermana ya había fallecido[5]. Murillo rara vez utilizó el apellido de su padre, y en su lugar tomó el apellido de su abuela materna, Elvira Murillo[3].
¿Por qué es conocido Murillo?
Murillo fue el principal pintor de Sevilla a finales del siglo XVII. Siguió siendo uno de los artistas europeos más admirados y populares del siglo XVIII y principios del XIX.
¿Qué tipo de pintor era Murillo?
Bartolomé Esteban Murillo (nacido a finales de diciembre de 1617, bautizado el 1 de enero de 1618 – 3 de abril de 1682) fue un pintor español del Barroco. Aunque es más conocido por sus obras religiosas, Murillo también produjo un número considerable de pinturas de mujeres y niños contemporáneos.
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Uno de los artistas más populares de su tiempo, Bartolomé Esteban Murillo fue un pintor barroco español, más conocido por sus obras religiosas, así como representaciones realistas de la vida cotidiana de su tiempo. Su obra temprana estuvo influenciada por los pintores Zubaran, Jusepe de Ribera y Alonzo Cano, que tenían un enfoque realista de la pintura, técnica que fue adaptada por Murillo. Su obra se caracterizaba por el realismo y el tenebrismo, o el contraste de luces y sombras, que combinaba para hacer formas suaves llenas de ricos colores. Sus obras posteriores evolucionaron hacia un estilo pulido que alimentó los gustos de los burgueses y aristócratas de su época, y recibió muchos encargos para ellos.
También recibió muchos encargos importantes de las órdenes religiosas de los franciscanos y de las cofradías de Sevilla y Andalucía. Por ello, los temas que más éxito le dieron fueron los religiosos, siendo la Virgen con el Niño y la Inmaculada Concepción.
En vida, Murillo tuvo un gran número de alumnos y seguidores, y en 1660 fundó la Academia de Bellas Artes de Sevilla. Hasta el siglo XIX, fue el único artista español ampliamente conocido en el mundo europeo, y su obra fue posteriormente imitada, asegurando su fama en toda España y en Europa.
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Murillo fue el principal pintor de Sevilla a finales del siglo XVII. Siguió siendo uno de los artistas europeos más admirados y populares del siglo XVIII y principios del XIX. Sus primeras obras estuvieron muy influenciadas por los primeros trabajos de Velázquez, ejecutados antes de que éste abandonara Sevilla en 1623, y por las pinturas de Zurbarán.El primer ciclo de pinturas famoso de Murillo fue realizado para el claustro del convento de San Francisco de Sevilla (1645). Le siguieron cuadros para la catedral (1658) y una célebre serie para la iglesia de la Caridad (1667-70), entre los que se encuentra el “Cristo curando al paralítico en el estanque de Betesda” de la National Gallery.Las visitas a Madrid (una de ellas, sin duda, en 1658) hicieron que Murillo conociera obras de Rubens y Van Dyck y de pintores italianos contemporáneos. Su estilo se hizo cada vez más libre en su tratamiento, como se aprecia en sus numerosas y conocidas representaciones de la Inmaculada Concepción.
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Bartolomé Esteban Murillo fue un pintor barroco español, hijo de Gaspar Esteban y María Pérez Murillo. Siguiendo las costumbres de la época, Murillo adoptó el segundo apellido de su madre, aunque a veces firmaba como Esteban. Fue el menor de catorce hermanos. Su padre era un hombre de modesta fortuna. Era un barbero-cirujano cuya situación económica le permitía mantener a sus numerosos hijos sin problemas. Murillo quedó huérfano a los nueve años, y es criado por una de sus hermanas mayores.
Su formación artística comenzó probablemente en 1635 en el taller de Juan del Castillo, un pariente de su madre que era un modesto pintor. La influencia de Del Castillo se aprecia en las primeras obras de Murillo, entre 1638 y 1640.
En 1645, Murillo se casa con Beatriz Cabrera, con quien tuvo diez hijos. En este año, Murillo recibe el primer encargo importante de su carrera, una serie de obras para los claustros del convento de San Francisco el Grande de Sevilla. Trabajará en ella hasta 1648. La serie representa historias de santos de la orden franciscana e incluye La cocina de los ángeles, la obra más célebre del grupo por su atención al detalle y realismo. El naturalismo y el claroscuro prevalecen en toda esta obra.